Fernando Mires - LAS CUATRO ESTACIONES (Damasco, Kiev, Europa, Caracas)
La llamada globalización no ha sido solo económica. Ha sido, hoy lo estamos viendo, política. Atrás quedaron los tiempos en que lo que acontecía en África o Europa no tenía nada que ver con América Latina. Hoy, en cambio, vivimos en un mundo inter-relacionado; en un país llamado Mundo donde los sucesos se conectan uno con otro a lo largo y ancho del globo y siempre de un modo inesperado. No se puede pensar en Siria sin pensar en Rusia y en Ucrania y en Europa y en los Estados Unidos e incluso en ese hasta ayer lejano Occidente latinoamericano. La reciente sublevación siria, para seguir con el ejemplo, tiene mucho que ver con Rusia, y Rusia con Ucrania y el resto de Europa, y por supuesto con China. América Latina tampoco está lejos: contiene a tres dictaduras dependientes del imperio ruso: las de Venezuela, Cuba y Nicaragua. Si en Moscú llueve, en esos países pueden desatarse tormentas. Cada acontecimiento, para seguir metaforizando, es como un tren que, puesto en marcha, s...