Fernando Mires - MADURO, EL ILEGÍTIMO
Como sucede con la mayoría de los conceptos que utilizamos en esta vida, ese significante llamado dictadura no ha estado ligado, a lo largo de su historia, al mismo significado. Originariamente, durante la fase de formación del imperio romano -nos informamos a través de Maquiavelo- el término dictadura estaba lejos de tener un significado peyorativo ( Discursos sobre la primera década de Tito Livio) . Dictador quería decir, en un sentido literal, “el que dicta las leyes”. Al emperador, en condiciones de excepción, le era concedida por un plazo determinado la atribución de dictar leyes especiales (hoy las llamamos decretos). En cierto sentido el emperador ocupaba el rango de un comisionado del estamento dictador de leyes, fuera este un parlamento o un tribunal. Por lo tanto el de dictador era un cargo legal y legítimo a la vez, entendiendo por legitimidad lo que entendían los romanos: un derivado de la legalidad. Para los romanos, no siendo sinónimos, la legitimidad provenía de la l